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Cabalgando entre viñetas

COWBOY DE CIUDAD

«Creo que el wéstern es el género que mejor ha resistido el paso del tiempo»

Javier Márquez Sánchez charla con Alberto Simón, al frente de la librería Elektra Cómic y editor de Laramie Ediciones, en una apuesta personal por los tebeos y las novelas gráficas dedicadas al wéstern.

 

Texto: JAVIER MÁRQUEZ SÁNCHEZ.

 

En un mercado dominado por superhéroes y modas efímeras, apostar por el wéstern puede parecer un gesto anacrónico. Sin embargo, basta cruzar la puerta de Elektra Cómic para entender que el género sigue muy vivo. De ese mostrador, de años de recomendar tebeos y novelas gráficas y de charlar con lectores, nació Laramie Ediciones, un sello dedicado casi en exclusiva al Oeste en viñetas. Al frente está Alberto Simón, librero, lector voraz y ahora editor militante de un territorio que muchos dan por agotado, pero que se resiste a bajarse del caballo.

Desde 2021, Laramie ha ido levantando un catálogo singular: quince títulos —catorce wésterns y uno bélico— que rescatan autores clásicos, a menudo inéditos en España, y los devuelven a las estanterías con ediciones cuidadas y criterio claro. En sus dorsos cabalgan nombres como Arturo del Castillo, Víctor de la Fuente o el maestro de la novela del género Louis L’Amour; pero también una idea: demostrar que el western no es un fósil polvoriento, sino un género flexible, adulto y contemporáneo. Sobre esa aventura editorial, sus referentes y los próximos proyectos de Laramie, conversamos con el jinete literario Alberto Simón.

¿Quién estás detrás de Laramie Ediciones?
Laramie surge como un proyecto de la librería Elektra Comic. Aunque como gerente de la librería, el editor soy yo, todo el equipo está involucrado. Por otra parte, hay un plantel fijo de colaboradores externos (traductores y diseñadores), además de un coordinador: Aitor Marcet.

¿Cómo y cuándo nació Laramie?
El proyecto echa a andar en 2021. La idea era recuperar una serie de historietas/autores, más o menos clásicos, que o bien están inéditos en España o bien solo disponen de ediciones muy antiguas, fuera del circuito de librerías. Todos los títulos han de tener un nivel de calidad contrastado.

Tenéis ya quince títulos publicados (catorce wésterns y uno bélico). ¿Qué tal ha respondido el público a vuestra propuesta?
Somos conscientes de que nuestra propuesta es muy restringida. Nuestro lector potencial no es el que hoy visita mayoritariamente las librerías de comics. Pero, aun así, pensamos que aún es viable un proyecto de estas características.

El wéstern es un género clásico, pero también muy flexible. ¿Qué piensas que aporta el cómic frente al cine o la literatura tradicional para contar estas historias?
El cómic del oeste, desde un principio se alimentó de la imagen “romántica” del far west que ofrecía el cine de Hollywood. Más tarde vino la influencia, muy potente, del spaghetti western, que se prestaba a las historias duras de un cómic dirigido a adultos. En ese sentido, creo que la historieta sigue girando.

 

«El wéstern cuenta con muchos seguidores, pero también con detractores. Una imagen estereotipada difícil de romper»

 

¿Cuáles son vuestros referentes: historietistas, dibujantes o guionistas de wéstern que consideráis fundamentales?
Cuando germinaba la idea de Laramie en mi cabeza, había dos nombres en el horizonte: Arturo del Castillo y Víctor de la Fuente. El primero, chileno-argentino, murió demasiado joven y fue un dibujante superlativo, que nadó como pez en el agua en el wéstern. Sin embargo, en España, salvo por los lectores muy veteranos, es un auténtico desconocido. Y, hasta que nosotros llegamos, no había ninguna obra suya disponible (publicada en España). De la Fuente, que también murió joven, dibujó uno de los wésterns más importantes de la historieta europea: Sunday (hoy descatalogada). Pero hizo muchos cómics del oeste más. Por algún motivo que desconozco, no se publica nada suyo desde hace años. Pero, por supuesto, el cómic wéstern por antonomasia es para nosotros Blueberry (creo que en esto no somos muy originales).

¿Cómo llegáis hasta los autores y obras que se publican en Laramie?
La mayoría de los autores que publicamos ya no están en este mundo. Eso dificulta mucho la publicación de sus obras. Algunos agentes son fáciles de rastrear, pero no todos. Con los autores vivos es mucho más sencillo gracias a las redes sociales.

Si tuvieras que recomendar una obra de vuestro catálogo que mejor refleje el espíritu de Laramie Ediciones, ¿cuál elegirías?
Loco Sexton. No es fácil encontrar dibujante y guionista compitiendo al mismo nivel de calidad. Además, este cómic respeta los códigos del género, pero sin caer en tópicos maniqueos (como toda la obra de Oesterheld, su guionista).

¿Qué retos específicos tiene editar wéstern frente a otros géneros?
El wéstern cuenta con muchos —y fieles— seguidores, pero también con detractores. Muchos jóvenes, muchísimas mujeres, tienen una visión muy sesgada del género que les espanta. Una imagen estereotipada difícil de romper.

De la mano del neowéstern en el cine y series de streaming, ¿crees que existe un interés renovado por las historias de este género, más allá del formato?
Creo que el wéstern es el género que mejor ha resistido el paso del tiempo. Es cierto que en muchas ocasiones con elementos que harían revolverse a John Ford en su tumba.

El último título que aparece en vuestra web es La ley del desierto. ¿Tendremos nueva aventura próximamente? Y si es así, ¿puedes adelantarnos algo sobre ella?
Tenemos dos títulos para cerrar el año. Curiosamente, los dos de autores españoles. Y ya nos pesaba no haber publicado todavía a ninguno. El más inmediato será la segunda entrega de la colección Gran Oeste, y está dedicado a Jesús Blasco, seguramente nuestro autor más reconocido internacionalmente y especialmente dotado para el wéstern. El último del año será puro espíritu Laramie: la publicación por primera vez en álbum de una historia de Jordi Bernet, uno de nuestros últimos grandes clásicos vivos.

¿Os planteáis explorar subgéneros como el spaghetti western, el weird western o los cruces con ciencia ficción y terror?
Aunque tengo contadas excepciones (la reciente y estupenda Sinners es una de ellas), no soy muy amigo de fórmulas híbridas: ver soldados alemanes zombis me repele. Así que, no, por ahí no vamos a tirar.

Puedes consultar su catálogo en laramieediciones.com

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